El primer ministro surcoreano, Han Duck-soo, habla durante una reunión del Gabinete, que tuvo lugar, el 8 de noviembre de 2022, en el complejo gubernamental de Seúl.
Seúl, 8 de noviembre (Yonhap) -- El primer ministro surcoreano, Han Duck-soo, ha ordenado, este martes, al Ministerio del Interior y Seguridad que vuelva a comprobar los sistemas de evacuación contra misiles y de respuesta de emergencia del país, en medio de la intensificación de las tensiones a raíz de una serie de lanzamientos de misiles norcoreanos.
Han emitió la orden durante una reunión del Gabinete, diciendo que ha habido críticas sobre el sistema de alerta de ataque aéreo del Gobierno surcoreano, cuando un misil norcoreano voló sobre la frontera marítima intercoreana hacia la isla de Ulleung, en el este de Corea del Sur, la semana pasada, antes de estrellarse cerca de aguas surcoreanas.
El lanzamiento del misil provocó que el Gobierno central emitiera una sirena de ataque aéreo, pero se informó de manera tardía a los residentes de la isla sobre la situación y la forma de respuesta.
El primer ministro ordenó al Ministerio del Interior y Seguridad "trabajar estrechamente con los Gobiernos locales para revisar las medidas sobre la acción pública y sistemas de respuesta a las situaciones de emergencia".
Han dijo que los ministerios pertinentes deben prepararse primero para la prevención de daños a causa de las provocaciones de Corea del Norte y la seguridad contra accidentes e incendios.
Mientras crecen los llamamientos a la rendición de cuentas sobre la estampida mortal de Halloween, ocurrida el 29 de octubre, que dejó un saldo de, al menos, 156 muertos, el primer ministro volvió a disculparse por la tragedia.
Han dijo, durante la reunión, que siente una gran responsabilidad por no haber protegido suficientemente la vida y la seguridad del pueblo.
Según Han, el Gobierno realizará esfuerzos supremos para identificar la causa de la tragedia, hacer que los responsables rindan cuentas y elaborar medidas para prevenir que tal tragedia se repita.
Una vigilia con velas tuvo lugar el sábado pasado, en Seúl, para llorar la muerte de las víctimas de la estampida, mientras los participantes sostenían carteles que decían: "La tragedia era evitable y el Estado no estuvo presente".
La policía recibió fuertes críticas por su inacción, a pesar de las desesperadas llamadas de emergencia advirtiendo del abarrotamiento, unas horas antes de que ocurriera el incidente en el barrio de Itaewon, en el distrito de Yongsan, en el centro de la capital surcoreana.
Cuando un legislador le preguntó acerca de la responsabilidad del Gobierno y la ira del público por la estampida humana, Han respondió que la policía en Yongsan fracasó en lidiar adecuadamente con el aumento de la multitud.
Asimismo, Han dijo, durante la reunión del comité parlamentario, que el Estado no estuvo presente.
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