En la imagen, tomada el 1 de septiembre de 2022, se muestran contenedores apilados en un muelle en la ciudad portuaria de Busan, en el sudeste del país.
Seúl, 11 de septiembre (Yonhap) -- La economía de Corea del Sur se encuentra perdiendo impulso, mientras el crecimiento de las exportaciones se ha ralentizado ante la debilitada demanda mundial, liderada por China, según informó, esta semana, el Instituto de Desarrollo de Corea del Sur (KDI, según sus siglas en inglés).
El sector de servicios de Corea del Sur ha mantenido su recuperación, liderada por un repunte en los servicios presenciales, pero los riesgos económicos se incrementaron debido a la ralentización económica mundial, según dijo el KDI, en su informe mensual de evaluación económica.
Según el informe, en medio de los impulsos de incrementos de los tipos de interés en el país y en el exterior, los bloqueos por el COVID-19 en las principales ciudades chinas sumaron presión a la baja en la actividad económica.
Las preocupaciones de una estanflación, una combinación de crecimiento ralentizado y alta inflación, han aumentado para la cuarta economía asiática, debido a la intensificada incertidumbre económica externa.
Las exportaciones, el principal motor de crecimiento económico surcoreano, mostraron señales de una desaceleración, a medida que la demanda mundial se ha debilitado. Las exportaciones nacionales crecieron por 22° mes consecutivo, en agosto, pero el incremento de las exportaciones se debilitó a un aumento de un solo dígito por tercer mes consecutivo. Las exportaciones crecieron un 6,6 por ciento interanual en agosto.
En agosto, las exportaciones de semiconductores se redujeron por primera vez en 26 meses, en medio del descendiente precio de semiconductores y la ralentización de la demanda mundial.
Corea del Sur también sufrió un déficit comercial mensual histórico, de 9.470 millones de dólares, en agosto, debido a los elevados precios energéticos mundiales. El país registró un déficit comercial por cinco meses consecutivos por primera vez en casi 14 años.
El KDI dijo que la caída en la industria de semiconductores podría representar una amenaza para el crecimiento económico nacional.
Los precios al consumidor del país crecieron a un ritmo más lento, en agosto, después de elevarse al máximo ritmo en 24 años, el mes pasado, mientras los precios mundiales del petróleo descendieron, en medio de las preocupaciones de una crisis económica mundial. Sin embargo, la presión inflacionaria sigue siendo elevada, debido a la volatilidad en los precios del petróleo y el debilitado valor del won frente al dólar estadounidense.
Los precios al consumidor, un indicador clave de la inflación, aumentaron un 5,7 por ciento interanual, en agosto, lo que supuso una desaceleración con respecto al aumento del 6,3 por ciento, registrado el mes previo. El incremento interanual de la inflación al consumidor se desaceleró por primera vez en siete meses.
Se estima ampliamente que el Banco de Corea (BOK) eleve aún más su tasa de política monetaria (TPM), en los próximos meses, para controlar la inflación.
El mes pasado, el banco central elevó su tipo de interés de referencia en 0,25 puntos porcentuales, hasta el 2,5 por ciento. La decisión tuvo lugar tras su primer aumento de gran nivel, de 50 puntos básicos, en julio, que representó el séptimo aumento de la TPM desde agosto de 2021.
En su última previsión de crecimiento económico, el BOK redujo su pronóstico para este año del 2,7 al 2,6 por ciento. El banco central elevó abruptamente su estimación de la inflación de este año, a su máximo en 24 años, del 4,5 al 5,2 por ciento.
paola@yna.co.kr
(FIN)