El primer ministro, Kim Boo-kyum, habla en una reunión gubernamental de respuesta al COVID-19, celebrada, el 31 de diciembre de 2021, en Seúl.
Seúl, 31 de diciembre (Yonhap) --- Corea del Sur extenderá las reglas de distanciamiento social endurecidas por dos semanas más, hasta mediados de enero, ha dicho, este viernes, el primer ministro, Kim Boo-kyum, en medio de los esfuerzos para reducir el número de casos graves de COVID-19 y contener la variante ómicron.
"Es demasiado pronto para creer que hemos superado la crisis", dijo Kim durante una reunión de respuesta al COVID-19, celebrada en Seúl, añadiendo que aún se reportan muchos pacientes de coronavirus en estado grave y muertes.
El Gobierno ha estado implementando reglas de distanciamiento social más estrictas desde el 18 de diciembre, tras un aumento de las infecciones por el virus.
Actualmente, las reuniones privadas se limitan a cuatro personas en todo el país, mientras se implementa el toque de queda, de 9:00 p.m. o 10 p.m., sobre el horario de operación en las instalaciones multiusos.
Se planeaba, originalmente, que las restricciones antivirus acabasen el domingo, pero con la última decisión, se implementarán hasta el 16 de enero.
Después de imponer las reglas de distanciamiento social endurecidas y alentar la inoculación de las vacunas de refuerzo, Kim dijo que la situación del coronavirus del país está mejorando. Recientemente, los casos nuevos diarios han permanecido en alrededor de 5.000, después de superar los 7.000.
Sin embargo, Kim advirtió contra la complacencia, ya que el Gobierno aún debe trabajar duro para conseguir más camas hospitalarias al objeto de tratar a 10.000 pacientes al día y necesita estar preparado por completo antes de que la variante ómicron, altamente transmisible, se propague de forma rápida por todo el país.
El primer ministro señaló que, si la situación del virus se estabiliza, después de que el pueblo muestre su conciencia cívica un poco más de dos semanas, el Gobierno considerará activamente aliviar las reglas antivirus.
Las reglas estrictas causaron un retroceso del plan gubernamental "living with COVID-19" (vivir con el coronavirus), cuya meta es el regreso gradual del pueblo a la vida normal, y también provocaron una fuerte protesta de los pequeños comerciantes y autónomos.
Para aliviar su sufrimiento, Kim dijo que el Gobierno decidió proporcionar, por adelantado, la compensación por daños por el COVID-19 para el primer trimestre. Alrededor de 550.000 autónomos recibirán 5 millones de wones (4.200 dólares) cada uno, mientras los cálculos reales de sus daños financieros y la compensación relacionada se llevarán a cabo posteriormente.
En cuanto al sistema gubernamental del "pase de vacunación" para los jóvenes, Kim dijo que será adoptado en marzo, con un período de gracia de un mes.
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